MUSEO RICHOTE:
GALERÍA DE PERSONAJES SINGULARES
SOFRONISCO DE ÉFESO (Filósofo griego. 465-396 a. C)
Autor de la Teoría del Acoplamiento Botón-ojal. Plantea su tesis filosófica en los siguientes términos: un botón sin ojal no es nada, pero ¿acaso es algo un ojal sin botón?. Por otra parte, si el botón es mayor que el ojal, ¿no estaremos en las mismas?. Concluye con la siguiente reflexión: la virtud está en el acoplamiento. Para demostrarlo, iba por las calles de Éfeso abrochando batas y capisayos, hasta que le pilló una cuadriga.
ORLANDO (Cordillera de los Andes. 1970).
Este murciélago vampiro se especializó en chupar la sangre a los componentes de los grupos musicales folklóricos de los Andes. De oído finísimo, en cuanto llegaba a sus tímpanos el sonido de la flauta de caña, el tiple, el requinto o la bandola, se lanzaba en busca de su intérprete, al que silenciaba para siempre de un mordisco. Fue condecorado en Perú y Bolivia, por su contribución a reducir el número de ritmeros que azotó el altiplano en los años 70.
EVELIN, ALIAS “PELUFRE JUSTICIERO”
( Boston. 1847)
Trajo en jaque al F.B.I. durante toda una década. Como en todas las familias hay al menos un indeseable, averiguaba quién era en cada casa y lo estrangulaba enrollándole al cuello un mechón de su pelo increíblemente recio. Después, sobre la encimera de la cocina le hacía trocitos y se los enviaba a los familiares del descuartizado junto con una frase: “No hay de qué”. El capitán de la policía de Boston siempre supo quien era, pero se apartó del caso porque Evelin le había librado de una cuñada y dos primos segundos.
