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TORO VANO. PIGMENTADO A BOLEO. 200 KILOS. NOMBRE: FILFACHO.

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Hijo de primos hermanos, durante su crianza mostró un coeficiente límite para topar. De embestida abúlica. Fue el primer toro indultado de la historia de la lidia por tener el lomo vacío, ya que era imposible desarrollar la suerte de las banderillas. “Salerito”, el único banderillero que lo intentó, perdió el equilibrio al asomarse y se las clavó a sí mismo en las manoletinas (zapatillas), siendo preciso desclavarlo del coso con la ayuda de un soplete. Tras saberse parte del patrimonio inmaterial de la humanidad, Filfacho se hizo poeta y muge odas.

CABEZA DE ZULÚ (Sudáfrica. S. XVIII).

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Cuando Nkebo Nkobe nació, su madre se echó a llorar desconsoladamente: era solo cabeza. Por no matarlo, le siguió alimentando. El niño hacía la digestión en la barbilla y expulsaba  las sobras por dos orificios que le hizo en la nuca el chamán de la tribu con una lanza desinfectada. Al cumplir los 14 dio el correspondiente estirón, llegando al extremo que se aprecia en la vitrina. Al morir, las autoridades le convirtieron en careta, inaugurando así el mercado de la careta africana.

“ARRECÍAS” (Ovejas españolas de clase media. 2014)

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Lola y Mari Fe, compañeras de pasto, venían disfrutando de un redil con calefacción eléctrica hasta la penúltima subida de la luz. En la actualidad, así es como andan por el aprisco durante el invierno.

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